Amir y la cadena


Amir llevaba días caminando en el desierto, sediento y cansado. Sin poder continuar, cayó abatido a merced de los chacales. Un pastor, al regresar de uno de sus recorridos diarios, encontró al peregrino moribundo y se apiadó de él. Le dio algo de agua y luego de un largo viaje a caballo, llegaron al pueblo. El pastor dejó al peregrino en una posada donde pasó la noche entre la vida y la muerte.
Al día siguiente Amir despertó mejor y conoció a Helua, la adorable anciana que manejaba la posada. Amir le pidió que le dejase quedar en la posada hasta recuperarse, ofreció pagar con una cadena de siete eslabones de oro. El precio de la estadía sería un eslabón por día, a lo que la viejita accedió. Sólo había una condición, el pago tendría que ser diario, no por adelantado y no al final. Todos los días, un eslabón, para hacer un total de siete días que serían suficientes para que Amir se recuperase.
Amir, tomo la única tijera disponible y cortó la cadena, pero con tan mala suerte, que la tijera se rompió, por lo que ya no pudieron hacer mas cortes. Aun así, Amir pudo pagar con un eslabón por día.
Como hizo Amir para pagar si tan sólo pudo cortar un eslabón?

El enigma del Sha y los herederos


El Sha Jahan está por morir y en su lecho de muerte llama a Almán, su visir de mas alta confianza. Al llegar, el Sha le dice “Mi querido Almán, es hora de decidir quién de mis dos hijos heredará mi fortuna. Diles tomen sus caballos y se dirijan a mi pueblo natal. Aquel cuyo caballo llegue último será el heredero. Jura por tu vida que cumplirás mi deseo tal como te lo he pedido.”
El visir, juró y el Sha cayó en su sueño final.
Almán pasó la noche en vela, perturbado por su promesa. Sabía que el Sha estaba desvariando, pero debía mantener su juramento.
Al amanecer, convocó a los herederos y les transmitió el deseo de su padre con palabras textuales. Los hijos del Sha eran excelentes jinetes, pero no entendían el motivo de tan absurdo pedido. Se negaban a a subir a los caballos argumentando que en el afán de lograr la fortuna morirían de sed divagando en el desierto.
El visir, con mucha sabiduría les dió un consejo, inmediatamente los hjos del Sha saltaron a los caballos y salieron a pleno galope.
Qué les dijo el visir para lograr tal reacción y a su vez mantener el juramento?

¿Qué cuadrado sigue la secuencia?

Acertijo. País revuelto


Di el nombre de un país que tiene dinero cuando está revuelto

El enigma del oso




Un oso camina 10 Km. hacia el sur, 10 hacia el este y 10 hacia el norte, volviendo al punto de partida.

¿De que color es el oso?


El enigma de EL CAMARERO



Un hombre entra en un bar y pide al camarero un vaso de agua. nunca antes se habian encontrado. el camarero saca una pistola de debajo del mostrador y apunta al hombre. el hombre dice: "gracias" y se va.

El enigma de EL PARTIDO


Dos tenistas juegan un mismo partido de tenis al mejor de 5 sets. Cuando terminan el partido ambos han ganado tres sets

¿Cómo puede ser esto?

El condenado


En los tiempos de la antigüedad la gracia o el castigo se dejaban frecuentemente al azar. Así, éste es el caso de un reo al que un sultán decidió que se salvase o muriese sacando al azar un papel de entre dos posibles: una con la sentencia “muerte”, la otra con la palabra “vida”, indicando gracia. Lo malo es que el Gran Visir, que deseaba que el acusado muriese, hizo que en los dos papeles se escribiese la palabra “muerte”. ¿Cómo se las arregló el reo, enterado de la trama del Gran Visir, para estar seguro de salvarse? Nos estamos olvidando de un detalle, al reo no le estaba permitido hablar y descubrir así el enredo del Visir.